lunes, abril 26, 2004

Bésame mucho y Código da Vinci

Creo que fue el miércoles, en distintos momentos y en distintos medios de transporte vi leer el Código da Vinci, (cuatro ocasiones) dato nada relevante si consideramos que el libro es un super ventas.
Pero ese mismo día, escuché en cuatro ocasiones Bésame mucho, en Moncloa, en Sol, en Pacifico y en ¿Atocha?
En acordeón (dos ocasiones), en flauta travesera, en un instrumento oriental, probablemente chino.
Una señal difícil de descifrar, yo estaba cansada de pensar, una tristeza me tenía noqueada, los ojos irritados -había dormido con los lentes de contacto puestos-, me sentía sucia, traía la misma ropa que el día anterior, con la leche aún en la campanilla -desde hace tiempo bebo soja.

Tenía ganas de no estar.