lunes, abril 20, 2009

Desde el perdón...

La decepción amorosa me ha traído dos semanas de insomnio. Creo que tengo hasta la madre a mis amigos de tanto hablar del tema. Bueno, no creo, me quieren y han sido pacientes conmigo. Todos, hasta la psicóloga, me dicen que el antagonista de esta historia no me merecía, que su mundo es más pequeño que el mío, que le puse más virtudes, que entre la ilustración y el oscurantismo eligió este último. bla, bla, bla...

¿Será mi narciso herido?
Hace un par de días sentía que había cometido una "gran" injusticia conmigo. Trate de buscar una respuesta racional, de ahí que buscara a mis amigos varones, una respuesta desde la lógica del macho.
¿miedo? ¿miedo al compromiso? ¿miedo a crecer? ¿inseguro? ¿no tiene una idea de familia? ¿No se siente merecedor de tu amor?

Ahora que es candidato a un cargo político ... ¿qué iba a hacer el sr. puesto político de derecha con una mujer tan de izquierdas como tú?
¿qué hará con la impronta que le has dejado? Eso está cabrón porque no eres fácil de olvidar.

En fin, la doble moral pudo más.

En fin no pondré en la balanza todo lo feo debo de perdonar y olvidar. El eligió otro camino no hay nada más que discutir.