jueves, diciembre 02, 2004

Cosas de niños.

Le dice Saltimbanqui a Bisbirije, a ti se te nota mucho la parte mexicana, y le hace una linea imaginaria para dividir los hemisferios.
Son graciosos, son muy conscientes de su doble nacionalidad, pero ahora dicen que son más mexicanos que españoles. Antes decían que eran españoles por fuera y mexicanos por dentro, ahora es lo contrario, la mexicanidad la llevan a flor de piel y lo gachupo dentro. Desde el 18 de diciembre al 10 de enero estarán bebiéndose esos mostos que tanto les gustan en la calle Laurel, allá en Logroño.
La navidad ya está aquí y la fiesta, que bien podría ser totalmente laica, ha colado en mi hogar ciertas dudas, no en mí sino en Saltimbanqui.
Me comentó, con un poco de tristeza, que los niños de su escuela ponen arbolito de navidad y nacimientos en sus casas. Traté de explicarle el porqué nosotros no lo hacemos.
Y me dice:
--Pues yo le dije a un niño que yo no creía en Dios y me preguntó si no me daba miedo que me castigara por no creer.
Se va y al poco rato escucho que le pregunta su hermano (que cumplirá en quince días tres años)

--Oye, ¿Tú crees en Dios? El otro le contesta con su lengua de trapo.
--Yo no
--Por qué.
--Porque estoy jugando con mis dinosaurios.
Ahora está menos preocupado, tiene la cabeza en sus vacaciones.