De trámite en trámite

Bueno, hace un par de días fui a realizar un montón de trámites par sacar mi credencial de elector, que me robaron en España, pero también a renovar mi licencia de manejo. Sobre la segunda me recomendaron que me fuera a un pueblo que está a media hora de mi casa, porque es el sitio donde me van a cobrar menos.

En fin, ahora como he pasado de vivir en un sitio declarado patrimonio de la humanidad a otro declarado fin del mundo. tengo un par de meses para preparar mi examen de suficiencia investigadora y encontrar trabajo, en fin, ahora disfruto de una beca matrimonial para dedicarme solo a eso.

El matrimonio va y viene con altas y bajas. No quiero volver a pasar por lo de los meses anteriores. Fue horrible.

Al final estamos viviendo en la casa que compró mi madre, un fraccionamiento nuevo (urbanización), lindo, tranquilo. Después de pasar unos diez minutos por el desmadre de la carretera nos metemos en un oasis de tranquilidad.
Mis hijos pueden andar en bicicleta sin problemas, hay muchas zonas para niños, y los parques están acondicionados para hacer ejercicio algo que agradezco porque los dejo en la escuela y me voy media hora a correr, después me voy a mi casa y hago otra media hora de pilates.

Mis primas y mis tías, se han portado estupendamente, hasta creo que un poco sobreprotectoras y mi madre, por supuesto, igual.

Me han dicho que instalaran la línea de teléfono en quince días, con lo cual podré integrarme al ciberespacio.


El otro día hubo junta de vecinos y cuál sería mi sorpresa al ver que uno de mis vecinos era el administrador del hotel donde trabajaba y que me despidió porque pensó que yo le había contado a su mujer su constante infidelidad. Esta historia tiene varias aristas que ya contaré.